El gobierno del presidente Luis Abinader ha intensificado las deportaciones de haitianos en situación migratoria irregular como parte de su compromiso con el cumplimiento estricto de las leyes dominicanas. Camiones llenos de ciudadanos haitianos son enviados a diario a los principales pasos fronterizos, en un proceso que cuenta con el respaldo activo del Ejército y la Policía Nacional.
La Dirección General de Migración (DGM) reportó la detención de 1,373 personas solo en un día, en operativos realizados en diversas provincias como Santo Domingo, Santiago, La Vega, Azua y Barahona. Estas acciones forman parte de un plan nacional de control migratorio que incluye intervenciones en 33 hospitales, donde se detecta a pacientes sin estatus legal una vez son dados de alta.
El proceso de deportación incluye la detención, traslado y repatriación de los indocumentados, con énfasis en el respeto a los derechos humanos. Las personas retenidas reciben asistencia médica, alimentos y registro biométrico en centros como el de Haina, antes de ser enviados a la frontera. La medida ha sido descrita por las autoridades como un componente clave de la política de seguridad nacional del gobierno.
Con estas acciones, el presidente Abinader reafirma su línea de cumplimiento firme con la Constitución y las leyes migratorias del país, en medio de una crisis prolongada en Haití. El operativo se mantiene activo en todo el territorio nacional, con un despliegue continuo que refleja la determinación del gobierno de proteger la soberanía dominicana.