El presidente Luis Abinader implementó este domingo una serie de reformas a la Constitución, destacando la reducción de 20 escaños en la Cámara de Diputados y la prohibición de modificar la Carta Magna en beneficio de cualquier presidente en ejercicio. Estas medidas buscan promover una mayor estabilidad política y prevenir la concentración de poder, asegurando la alternancia en el gobierno y un sistema de representación más ajustado.
Entre los cambios aprobados se encuentra la unificación de las elecciones a partir de 2032 y la independencia reforzada del Ministerio Público. Con esta reforma, el procurador general ya no será designado por el presidente, sino por el Consejo Nacional de la Magistratura, con el objetivo de proteger la justicia de cualquier interferencia política. Esta medida también redefine la composición y funciones del Consejo, fortaleciendo la imparcialidad en el sistema judicial.
Durante la ceremonia de proclamación en el Congreso Nacional, el presidente Luis Abinader y otros altos funcionarios expresaron su respaldo a las reformas. Abinader destacó que estas modificaciones representan el «fin del caudillismo» en el país, promoviendo una visión de poder como responsabilidad y no como privilegio. Asimismo, reafirmó el compromiso de su gobierno con una democracia sólida y con instituciones fuertes que trasciendan liderazgos personales.
Además, la Constitución establece que cualquier futura reforma deberá ser aprobada mediante referendo. Sin embargo, dado que el país aún no cuenta con una ley de referendo, se dispuso que el Congreso Nacional tendrá al menos siete legislaturas para establecer los marcos legales necesarios, reforzando así la seguridad democrática y la voluntad popular en República Dominicana.