En medio del aumento de los operativos de control migratorio en la República Dominicana, ciudadanos haitianos han comenzado a reconocer el trato humano que están recibiendo en los centros provisionales. Tal es el caso de Fidel Lamour, quien fue trasladado al Vacacional de Haina y destacó la dignidad con la que fue tratado. “Nos dieron la comida, y no vi maltratos. Gracias a Dios, me trataron bien”, expresó Lamour, quien lleva 22 años residiendo en el país.
El Vacacional de Haina ha sido señalado en ocasiones anteriores por supuestos abusos, pero testimonios como el de Lamour refuerzan el compromiso del gobierno, encabezado por el presidente Luis Abinader, de garantizar el respeto a los derechos humanos, incluso en medio de procesos de deportación. Lamour aseguró que, pese a su detención, esta fue la primera vez que estuvo en ese centro y quedó sorprendido por el respeto con que fue recibido.
Sin embargo, el ciudadano haitiano denunció que en las calles la situación puede ser diferente. “Los guardias que están en la calle trabajando son los que abusan. Aunque la gente tenga sus papeles, como quiera los suben al camión”, afirmó, haciendo un llamado a que se mantenga la coherencia entre los operativos y los protocolos establecidos por la Dirección General de Migración.
A pesar de todo, Lamour expresó su respaldo a las medidas migratorias en zonas como Friusa, donde la presencia de haitianos indocumentados ha generado preocupación. “Yo soy haitiano, pero todo aquel que está ilegal, deben deportarlo para Haití”, dijo con firmeza. Estas declaraciones respaldan el esfuerzo del presidente Abinader por aplicar la ley con firmeza, pero sin renunciar al respeto humano.